Edgar Mario Carvajal Castaño (*)
Terminamos el mes de abril de 2023 y que bueno preguntarnos: ¿Por qué la mayoría de la gente no gusta de leer?
Porque se lee mal, y cuando se hace mal algo, uno no disfruta lo que hace, pero leer bien permite que uno sepa mejor qué es el mundo y quién es uno.
La pésima formación lectora impartida en nuestra época —época de la prisa reclamada, de la trivialidad aplaudida, de la tontería autorizada, de la insulsez exaltada— ha reducido la lectura a simple información y a banal entretenimiento, estropeándonos el goce de pensar, la fiesta de pensar por sí mismo.
En esta ocasión quiero compartir un decálogo especial, con la esperanza de que lo lean con especial detenimiento.
1. No se lee rápido una página, sino pacientemente en las entrañas del texto, toda buena lectura reclama que uno se detenga, se concentre y reflexione exhaustivamente.
2. Lo importante de leer no es informarse, sino producir un pensamiento propio.
3. En un comienzo conviene leer pocas páginas para leer bien, convencidos que quien logra leer bien ya querrá, en adelante, leer mucho.
4. Evocando a Estanislao Zuleta: “No se le lee para saber más, se lee para pensar mejor, guardando la esperanza de que, si se lee mejor, quizás podamos vivir mejor colectiva y personalmente”.
5. Se puede leer cualquier libro y a cualquier autor, pero es importante ir decantando los autores más profundos de que disponemos.
6. Ningún texto que valga la pena es fácil, todo lo bello y profundo es exigente.
7. Toda buena lectura se hace con dos pares de ojos: con un par se registra lo que me dice el texto, y con el otro par detallo cómo lo dice.
8. Es válido afirmar: “Solo lee quien escribe”.
9. Al finalizar la lectura de un libro siempre debería haber un texto recién nacido: el texto fragmentario de las notas de lectura que fue generando el diálogo de uno con el paso a paso del libro.
10. Se escribe, para uno entender(se) mejor, pues las palabras que se van asentando en el papel van trayendo consigo las ideas y la lucidez que al principio no se poseían.
Leemos, para que la lectura sea fecunda, para entender e interpretar mejor el mundo que vivimos y sentimos.
(*) Autor del libro, “Noventa segundos con el Profe”. Medellín, Colombia, abril 29 de 2023.
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